Martín López Mendívil

Lugar 5 (en monto recibido por SDUOP)

$309,303,222

Simularon competir para quedarse con obras

Martín Guadalupe López Mendívil

19 Obras

$309,303,222

El monto representa el 3.06% del gasto total en obras en Sinaloa.

Es el quinto constructor que más dinero de obra pública se llevó en el sexenio malovista.

Nació en Los Mochis, Sinaloa, el 12 de diciembre de 1962. Es Presidente del Comité Regional de Promoción Económica de la zona norte del Consejo para el Desarrollo Económico de Sinaloa.

En 6 años, el ex Gobernador Mario López Valdez asignó a Grupo Calsa 21 contratos que sumaron 316 millones 402 mil 814 pesos, en algunos procesos de contratación simularon competir con otras empresas mochitenses para quedarse con la obra.

A través de la extinta Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas recibió 309 millones 303 mil 222 pesos y mediante el Instituto Sinaloense de la Infraestructura Física Educativa obtuvo 7 millones 99 mil 592 pesos.

Es hijo del empresario de la construcción Francisco López Reyes, fundador de Grupo Calsa, un corporativo que integra las empresas Constructora y Arrendadora López; Constructora e Inmobiliaria LM y Tecnoblock de Los Mochis, así como la productora de camarón Acuícola Santa Fe y Estación de Servicios El Trébol.

Aunque opera desde 1990, en julio de 1994 se creó Constructora y Arrendadora López, según el acta constitutiva 2 mil 495, en la que aparecen como socios los hermanos: Martín Guadalupe, Carlos, Francisco y José López Mendívil.

“La actividad principal de Calsa es la construcción de caminos de terracerías, carreteras con carpeta asfáltica, canales, puentes de concreto, revestimiento de canales con concreto, urbanización de fraccionamientos con pavimentación de concreto”, se detalla en la página www.grupocalsa.com.mx.

Nueve años después, el 21 de mayo de 1999, fundaron la segunda empresa del grupo, Constructora e Inmobiliaria LM, según el Acta Constitutiva 1046.

“Constructora e Inmobiliaria LM S. A. de C. V., inicia su camino empresarial construyendo fraccionamientos como Santa Rosa, con un desarrollo de 199 viviendas; fraccionamiento La Joya, construyendo 349 viviendas; fraccionamiento Mediterráneo, con un total de 867 viviendas y continuando con la construcción de obra pública y privada como: naves industriales, supermercados, escuelas, redes de agua y drenaje, pavimentaciones, carreteras, obras portuarias, entre otras”, se informa en el sitio web.

El corporativo opera también en Baja California, Jalisco, Tepic, Chihuahua, Nuevo León, Veracruz y Yucatán.

Grupo Calsa “ganó” las dos etapas de construcción del Museo Trapiche, obra que concluyó, además, con un retraso de un año con cinco meses, pero el Gobierno de Sinaloa le pagó 160 millones 74 mil 709 pesos.

Contrataciones irregulares

La mañana del 7 de marzo de 2012 fue realmente ocupada para Carlos Ramón López Castro, director de Normatividad y Contratos; Dionisio Sánchez Félix, ex director de Control y Seguimiento de la Obra Pública; Armando Trujillo Sicairos, jefe del Departamento de Licitaciones y Contrataciones; José Luis Ulloa Miranda, jefe de Seguimiento de Contratos.

Llegaron temprano a la oficina y, desde las 8:00 hasta las 11:00 horas de aquel día, asignaron un contrato por hora a la empresa de la familia López Mendívil.

En los cuatro procesos de concurso de invitación, los ahora ex funcionarios fallaron a favor de Grupo Calsa, en los que fingieron competir con las mismas empresas: Constructora Gusa, propiedad de Miguel Ángel Gutiérrez Bazúa; e Ingenieros y Equipos Mecánicos.

A las 8:00 horas de ese 7 de marzo de 2012, Constructora y Arrendadora López le ganó los trabajos en la carretera Los Mochis-Ahome y Los Mochis-El Fuerte-Choix, a Ingenieros y Equipos Mecánicos y Constructora Gusa.

A las 9:00 horas, Constructora y Arrendadora López le ganó los trabajos de conservación menor de la carretera internacional No. 15, El Carrizo-El Fuerte, a Ingenieros y Equipos Mecánicos y Constructora Gusa.

A las 10:00 horas, Constructora y Arrendadora López le ganó los trabajos de conservación de las carreteras en Ahome y El Fuerte, a Ingenieros y Equipos Mecánicos y Constructora Gusa.

A las 11:00 horas, Constructora e Inmobiliaria LM le ganó la conservación de las carreteras Los Mochis-El Fuerte-Choix, a Ingenieros y Equipos Mecánicos y Constructora Gusa.

Esa mañana, la extinta SDUOP, entonces a cargo de José Luis Sevilla Suárez Peredo, quien fue inhabilitado para ocupar algún cargo en la administración pública por 3 años, adjudicó a las empresas del Grupo Calsa 6 millones 894 mil 144 pesos.

En los cuatro procesos de concurso de invitación a terceros, se usó el criterio de promedio para elegir a la empresa ganadora, como lo establece el artículo 32 de la Ley de Obra. Sin embargo, en dos de los cuatro procesos de contratación, el presupuesto base tomado como referencia excedió la cantidad establecida para tal procedimiento que, en 2012, fue de 605 mil pesos hasta un millón 815 mil pesos. En otras palabras, debieron licitarse.

Dos días después, el 9 de marzo de 2012, repitieron el simulacro de competencia: las tres mismas empresas participaron en el proceso de contratación de los trabajos de conservación de la carretera Los Mochis-El Fuerte-Choix. Y, otra vez, Constructora e Inmobiliaria LM ganó el contrato por un millón 837 mil 899 pesos.

Sin embargo, esta obra debió licitarse porque supera el monto establecido de licitación pública de un millón 815 mil pesos.

Lo mismo sucedió con el contrato asignado el 26 de septiembre de 2014, en la que nuevamente Grupo Calsa aparentó competir con la Constructora Gusa y con Aho-Sin.

Se le asignaron 2 millones 198 mil 531 pesos para que concluyera el sendero peatonal y la ciclopista del Cerro La Memoria, en Los Mochis, obra por la que anteriormente se le había contratado en noviembre de 2012 pero que, al final, le pagaron 9 millones 163 mil 516 pesos.

El 2012 fue cuando Grupo Calsa obtuvo más contratos por medio de sus empresas. En los dos procesos de licitación en los que participó, fingió enfrentar a las dos mismas constructoras mochitenses para quedarse con las obras: Gructever y Constructora Gusa.

El 11 de julio de 2012, Carlos Ramón López Castro dio a la empresa Constructora e Inmobiliaria LM el gane de la construcción de la biblioteca municipal de El Fuerte por 2 millones 316 mil 304 pesos, en un concurso en el que sólo compitió contra Grutecver.

Al mes siguiente, el 9 de agosto de 2012, sólo contendió la empresa de Gutiérrez Bazúa, empresario y amigo de Malova: Constructora Gusa. Sin embargo, fue desechada del concurso y así Grupo Calsa se quedó con el contrato para la construcción de un carril adicional de la carretera Los Mochis-Ahome por 7 siete millones 653 mil 689 pesos.

Convenios excesivos

El 43 por ciento de los contratos asignados a Grupo Calsa fueron ampliados. De los 21 contratos, en nueve se extendieron los montos y el plazo, sin que se justificara la rectificación del proyecto.

El 89 por ciento de los convenios excedieron el límite del 25 por ciento del precio y días permitidos por el artículo 38 de la Ley de Obra.

“La contratante, dentro del programa de inversión aprobado, bajo su responsabilidad y por causas supervinientes que así lo justifiquen, podrá celebrar convenios para modificar el monto o plazo fijados en el contrato de obra pública o de servicios relacionados con la misma, siempre y cuando, no se rebase el 25 por ciento del monto o del plazo pactados, ni impliquen variaciones substanciales en el proyecto original”, establece el primer párrafo del artículo 38 de la Ley de Obra.

El Museo Interactivo Trapiche fue la obra que más tiempo fue aplazada. La extinta SDUOP aumentó 18 veces el plazo de entrega. La fecha inicial de construcción fue establecida del 11 al 31 de diciembre de 2013, sin embargo los trabajos fueron aplazados en dos ocasiones, por lo que se extendieron un año y 41 días más, hasta el 24 de marzo de 2015, según el contrato CONT-SDUOP-LP-MUSEO-246-2013 y los convenios CONV-SDUOP-C-DPE-048-2014 y CONV-SDUOP-CA-AP-051-2014, que va en contra de la ley del artículo 38 de la Ley de Obra.

En total, con la modificación de los nueve contratos, recibió 25 millones 817 mil 162 pesos adicionales y mil 118 días que equivalen a 3 años.

Diferentes contratos para la misma obra

Grupo Calsa “ganó” las dos etapas de construcción del Museo Trapiche, obra que concluyó, además, con un retraso de un año con cinco meses, pero el Gobierno de Sinaloa le pagó 160 millones 74 mil 709 pesos.

Hay contratos, además, que repiten la obra requerida.

El 2 de diciembre de 2013, Suárez Peredo entregó el contrato a Grupo Calsa para la construcción de la segunda etapa del Museo Interactivo El Trapiche, localizado en Los Mochis.

El costo ascendió a 89 millones 84 mil 693 pesos. Los trabajos de la obra debían concluir el último día del año.

Un año después, el 30 de diciembre de 2014, un día antes de concluir el año fiscal, contrataron otra vez a la empresa para construir la misma obra: la segunda etapa del Museo Interactivo El Trapiche. Esta vez el costo de la obra fue de 70 millones 990 mil 16 pesos.

Al final, el museo que está bajo la tutela de la familia Salido, dueños de El Debate, fue cobrada en dos partes, sin que los contratos especifiquen exactamente en qué consisten las labores de la segunda etapa. El monto total pagado fue 160 millones 74 mil 709 pesos. Y un retraso de un año con cinco meses.